Cínicos / La risa

junio 8, 2008

La risa

La risa abundante y reiterada garantiza una vida saludable, si bien no la eternidad.

Los cínicos consideran que la forma de vivir es parte fundamental de la filosofía e inseparable de su manera de pensar. A veces se habla de filosofía cínica, otras veces de actitud cínica y otras simplemente de locura.

El término cínico es uno de esos términos que han ido perdiendo su significado original y transformándose en otro distinto al que tuvo en sus orígenes. Tanto es así que hay algunas propuestas para usar los términos quínico o kínico, con el fin de diferenciar el concepto de cínico en sentido filosófico, de su sentido popular. Filosóficamente de lo que se trata, es de retomar o de pensar de un modo nuevo y diferente algunos temas antiguos, ya que el paso del tiempo ha cambiado completamente su significado, su origen y desarrollo han sido velados, para llegar a significar hoy, poco más que un insulto.

El cinismo es una filosofía teórica y una práctica, pero también una forma de vida, es una filosofía que pretende alcanzar la felicidad mediante la sabiduría y la ascesis, uno de los rasgos que diferencia al cinismo de otros movimientos. Esta actitud les emparentaba con el estoicismo, aunque su desvergüenza les volvía a alejar.

Se pueden distinguir dos fases en el movimiento cínico:

·        La primera fase se desarrolló básicamente en Grecia, durante los siglos -IV y -III

·        La segunda fase se desarrolló en las grandes ciudades del imperio romano: Roma, Alejandría y Constantinopla, y duró desde los siglos I a V.

 El nombre de cínicos tiene dos orígenes diferentes asociados a sus fundadores.

·        El primero viene del lugar donde Antístenes solía enseñar, que era un gimnasio llamado Cinosarges, que se puede traducir como el perro blanco o el perro veloz.

·        El segundo origen tiene que ver con comportamiento de Antístenes y de Diógenes, que se asemejaba al de los perros, por lo cual la gente les apodaba con ese nombre (kinicós).

El cinismo pretendía dar una respuesta individual a la incertidumbre que se vivía en este periodo de crisis cultural, manifestando su malestar y descontento, y también librarse de los caprichos de la fortuna, guiando al individuo hacia la felicidad. Era característico de los cínicos la trasgresión continua, tanto de los valores tradicionales, como de las normas sociales.

Los cínicos tomaron como modelos a la naturaleza y los animales, los adoptaron como ejemplos de autosuficiencia y basándose en ello propusieron un modelo de comportamiento ético que consideraban fundamental para alcanzar la felicidad, aunque esto solo era posible mediante una rigurosa disciplina física y mental.

El cinismo es una forma de vivir, pero también de pensar y de expresarse. Son conocidos en gran parte por dichos y anécdotas, que fueron transmitidos en forma de colecciones, la más usada es la de Diógenes Laercio, referencia fundamental para el estudio no solo de los cínicos, sino de gran parte de la filosofía anterior a su autor. Utilizaron recursos literarios diversos donde no faltan la parodia, la sátira, la anécdota o la burla, pero siempre de forma escandalosa y provocadora.

Invalidar la moneda en curso.

Diógenes se vio obligado a abandonar Sinope, porque su padre o él mismo, se dedicaron a invalidar monedas. A raíz de todo esto su padre fue encarcelado y Diógenes tuvo que huir.

Se formó la leyenda de que Diógenes fue a consultar al oráculo de Delfos, y recibió como respuesta a su pregunta el enigmático consejo de invalidar la moneda, que se acabó convirtiendo en la consigna cínica, y en metáfora de buena parte de su comportamiento. Lo cual podría ser considerado un antecedente lejano de la importante consigna nietzscheana sobre la transvaloración de los valores. Invalidar los valores y cambiarlos por otros fue uno de los retos que asumieron los cínicos y que persiguieron con insistencia.  

La libertad radical.

La libertad radical es libertad de pensar, de acción y de palabra. El cínico se diferenciaba de los demás por su desvergüenza radical, por adoptar modos de vida que escandalizaban a su sociedad, por predicar la autosuficiencia, la libertad de palabra y la austeridad como cosas necesarias para alcanzar la tranquilidad de ánimo y con ello la felicidad.

Se proclamaban cosmopolitas y liberados de cualquier obediencia a las instituciones, convenciones o leyes, ya que estas son siempre locales, y ellos se consideraban ciudadanos del mundo.